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  1. Mi Gato
Dic. 22, 2022

Ganas de jugar

Algunos gatos simplemente disfrutan divirtiéndose con su cola. Esto es especialmente cierto para los gatitos, a los que les encanta perseguir todo lo que se mueve. A medida que crecen, estos pequeños felinos aprenden que es más útil perseguir presas y otras cosas que no estén pegadas a su cuerpo. Sólo cuando tu gato adulto parece obsesionado con su cola, debes observarlo bien, ya que podría ser una señal de que está incómodo o tiene dolor.

Infecciones y lesiones

La cola de un gato es propensa a sufrir lesiones, como heridas por mordiscos, abrasiones, fracturas e inflamaciones. Cuando los gatos se lesionan, intentan instintivamente lamer la herida para limpiarla o aliviar el dolor cuidando la zona afectada. Como resultado, verás a tu gato perseguir su cola hasta llegar a la lesión. Si sospechas que tu gato puede tener una herida, tanto si está infectada como si no, puedes ponerte en contacto con el veterinario.

Alergias

Al igual que los humanos, los gatos pueden padecer alergias. Las más comunes en los gatos son las alergias alimentarias y las alergias a las pulgas. La reacción alérgica provoca enrojecimiento, hinchazón y picor, lo que por supuesto resulta incómodo para tu gato. Si notas que tiene estos síntomas, acompañados o no de la persecución de la cola, ponte en contacto con tu veterinario.

Síndrome de hiperestesia felina

Algunos gatos se persiguen la cola debido a una afección denominada síndrome de hiperestesia felina. Los gatos afectados son extremadamente sensibles en una zona concreta de su piel generalmente el punto donde la cola se conecta con el lomo y pueden responder agresivamente cuando se les toca. También puedes notar cómo la piel se retuerce o se enrolla a lo largo de la espalda del gato. Si reconoces este comportamiento, acude al veterinario para que pueda averiguar qué le pasa exactamente a tu amigo felino.

Cola de semental

La cola de semental (hiperplasia de la glándula supracaudal) es una enfermedad de la piel que es más común en los machos no castrados. En los gatos con esta afección, las glándulas sebáceas de la base de la cola son hiperactivas y producen demasiada grasa, lo que provoca síntomas como pelo graso y enmarañado, acné y, a veces, incluso mal olor. Si ves a tu gatos perseguirse la cola, puede ser porque quiere llegar a la zona afectada. Ponte en contacto con tu veterinario si sospechas que tu gato puede estar sufriendo de esta cola de semental.