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Vitamina A
La vitamina A es muy importante tanto en humanos como en gatos. Se puede encontrar principalmente en el hígado, el aceite de hígado de pescado, la leche y las yemas de huevo, y ayuda a mantener la piel, el pelaje, los músculos, el sistema nervioso y la función tiroidea de tu gato. Una deficiencia podría provocar retraso en el crecimiento de los gatitos, debilidad muscular, pelaje desaliñado y ceguera nocturna. Una sobredosis de vitamina A, por otro lado, es posible pero muy rara, ya que casi siempre es causada por los dueños de gatos que les dan a sus felinos suplementos de vitamina A o cantidades excesivas de hígado. Para asegurarte de que tu gato obtenga la cantidad justa de vitamina A, elige comida para gatos de alta calidad.
Vitamina B
Hay 8 tipos diferentes de vitamina B: tiamina (B1), riboflavina (B2), niacina (B3), ácido pantoténico (B5), piridoxina (B6), biotina (B7), ácido fólico (B9) y cobalamina (B12). La cuestión es que la vitamina B es soluble en agua, lo que significa que cualquier vitamina B que el cuerpo de tu gato no necesite en ese momento se eliminará a través de su orina en lugar de almacenarse. Por ello, estos nutrientes deben ser proporcionados a tu felino a diario, a través de una dieta completa y equilibrada. Sin embargo, las deficiencias de vitamina B son bastante raras, aunque pueden ocurrir cuando los gatos tienen anorexia o comen grandes cantidades de mariscos.
Vitamina C
¿No has encontrado ninguna mención de la vitamina C al estudiar el empaque de la comida de tu gato? No te preocupes, a diferencia de los humanos, los gatos pueden producir su propia vitamina C al descomponer la glucosa. Sin embargo, alimenta a tu gato con una dieta completa para asegurarte de que no le falte ningún nutriente.
Vitamina D
Mientras que los humanos pueden obtener su dosis diaria de vitamina D a través de la luz solar sobre su piel, los gatos no pueden. Los gatos necesitan que esta vitamina les sea suministrada en la cantidad justa, por eso es tan importante ofrecerle a tu gato un alimento completo y equilibrado. Muy poca vitamina D puede provocar enfermedades cardíacas y trastornos óseos, aunque demasiada de esta vitamina también puede ser problemática.
Vitamina E
La vitamina E es una vitamina esencial para los gatos, lo que significa que tu felino no puede crearla dentro de su cuerpo al combinar otros nutrientes, por lo que la vitamina E debe formar parte de su dieta diaria. Como la vitamina E es un antioxidante, juega un papel importante en la protección de tu gato contra enfermedades cardíacas, pérdida de visión y problemas neurológicos. Una dieta completa y equilibrada es vital para prevenir la deficiencia de vitamina E, ya que puede ser causada por una dieta que contiene demasiados ácidos grasos poliinsaturados.
Vitamina K
La vitamina K se puede encontrar principalmente en verduras de hoja verde y otras verduras como el brócoli y las coles de Bruselas. Notarás que estas verduras no suelen estar presentes en la dieta de un gato, pero eso no es ningún problema. Los gatos pueden sintetizar su propia vitamina K, por lo que solo los componentes básicos de esta vitamina deben estar presentes en su comida.
